A Daniel Sancho (29 años) se le complica sus circunstancias por momentos. Si ayer testificó ante el juez y se declaró no culpable, ahora el cocinero se queda, de nuevo (y ya van tres) abogado. El tiempo apremia pues hoy acabamos de conocer una nueva fecha importantísima para su caso: el 27 de noviembre, volverá a declarar.
Tal y como confirma Álvaro López, periodista enviado a Tailandia, en esta nueva fecha, Daniel Sancho, acusado de homicidio, ocultación de pruebas y de destrucción de documentación deberá acudir, de nuevo a los juzgados para aportar nuevas pruebas que acompañen a su versión de los hechos, que pasan por sostener, en todo momento, que él jamás quiso acabar con la vida de Edwin Arrieta que su muerte fue un accidente y que tampoco destruyó su pasaporte. Lo único que sí ha confesado ha sido haber descuartizado el cuerpo del cirujano y haber tratado de eliminar las posibles pruebas que le podrían inculpar.
Será entonces cuando la Fiscalía también podrá confrontar esas pruebas que ofrezca la defensa de Sancho. Y, una vez con todas presentadas, será el juez quien las examine y quien las valore. Además, ese mismo día se podría fijar la fecha del juicio del hijo de Rodolfo Sancho que, muy previsiblemente, podría ser de aquí a tres o cuatro meses, entre marzo y abril del nuevo año.
La complicada situación judicial que se le plantea a Daniel Sancho
Recordemos que Daniel Sancho necesita un abogado que esté colegiado en Tailandia para que ejerza su defensa. Sin esta figura, carece de representación legar. Hasta ahora, ha tenido tres abogados que han ejercido esa figura, siendo los dos últimos de oficio, es decir, designados por la justicia tailandesa.
El primero, que había sido buscado ex profeso por el equipo legal en España de Daniel Sancho, fue despedido por diferencias con Marcos García Montes, director de la estrategia judicial. Además, a la familia no le gustó que el letrado diese declaraciones y hasta ofreciese una entrevista, “¿dónde queda el secreto profesional?”, se preguntaba el abogado español.
El último, que ayer estuvo con él en los juzgados, también ha renunciado a continuar con su defensa. El profesional declina este trabajo debido a la “estrategia errática del equipo de abogados español”, ha confesado. E iba más allá, “pocos abogados pueden estar de acuerdo”.
Lea el artículo completo aquí